La Mérida romana
El periodista ha ido a la ciudad romana de Mérida como
miembro de número de la Academia Extremeña de Gastronomía para entregar los
premios a destacadas personalidades del sector de la buena cocina extremeña,
donde al final hubo un rico y amplio cóctel con tapas de lo mejor de la
gastronomía regional, tales como el famoso jamón de cerdo ibérico, de la denominación de origen Dehesa de
Extremadura), caramelo crujiente de queso de La Serena, patatas revolconas con
pimentón de La Vera y sus torreznos, mini pita con Corderex marinado en sal de
yogur con hierbas aromáticas, ravioli crujiente con cabrito de Extremadura,
morros de vaca extremeña entomatados en pan brioche, tarta de queso con frutos
del bosque y mini macarones con crema de miel de las Villuercas y de los
Ibores.
Pero
no hemos venido aquí a hablar de gastronomía, sino de la preciosa ciudad romana
de Mérida, capital de la región ibérica de la Lusitania del Imperio Romano, que
abarcaba buena parte de Portugal y que está declarada ciudad Patrimonio de la
Humanidad. Antiguamente se llamaba Augusta Emérita, fundada en el año 25 antes
de Cristo por los soldados eméritos, ya retirados, del ejército imperial
romano.
Y qué
hay que ver en esta ciudad tan antigua. Sin duda alguna el teatro romano, que
es el verdadero símbolo de Extremadura, ya que en él se viene representando
cada verano desde 1933 un festival de teatro clásico greco latino, y que lo
estrenó la actriz Margarita Xirgú, en presencia del entonces presidente de la
II República española. Su resonancia es tal que no se necesitan altavoces para
que los 6.000 espectadores puedan escuchar las representaciones.
Allí mismo está el anfiteatro que era el lugar donde se celebraban las luchas de los gladiadores. Tiene forma elíptica y una cabida para 15.000 espectadores. También es del siglo I antes de Cristo.
“Si
uno quiere saber de Roma que venga a Mérida” le dijo en plan broma el
Rey Juan Carlos al entonces presidente de la República de Italia cuando ambos
inauguraron el precioso y magnífico Museo Romano de la ciudad, donde se
conservan verdaderas joyas del mundo hispano - romano.
Margarita Xirgú en el teatro romano
Hay
muchísimas cosas más que ver en Mérida (El templo de Diana el arco de Trajano,
el acueducto de los Milagros, el puente y circo romanos …), pero si uno quiere
comer bien, vaya al restaurante Tuétano, abierto hace tan solo un año y ya premiado
por la Academia Extremeña de Gastronomía, por su buen hacer en la cocina. En su
bodega se pueden ver unas ruinas romanas. ¡Buen provecho!
Para ver todo el reportaje en el programa "En Directo" que se edita desde los Estados Unidos picar este enlace:
https://youtu.be/WkkgOsXtPpQ?si=7ylyansPraIaRdkO
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